24.7.07
Rookies
Después de la universidad volvemos a ser novatos a la hora de beber. Es más, las resacas, que antes ni impedían que nos levantásemos a las 7 de la mañana al día siguiente a hacer un examen, ahora no sólo duran un día sino dos. Parece que también viene regalada una especie de diarrea que arde con la intensidad de mil soles y podría hacerle llorar hasta a Dennis Rodman.
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